Últimamente, se han puesto de moda las tarjetas turísticas en las principales ciudades de Estados Unidos: Chicago, Nueva York o Boston tienen sus tarjetas turísticas, y San Francisco no iba a ser menos, así que me he puesto la gorra de explorador durante unos días y he usado una San Francisco Sightseeing Pass para poder contaros mi experiencia usando una tarjeta turística en la ciudad. En todas ellas generalmente se incluye un autobús de dos pisos en el que puedes entrar y salir de él durante el día las veces que quieras, y es una buena forma de descubrir los principales sitios turísticos de la ciudad, así que nos valdremos de él para movernos por San Francisco.
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Primer día: Tranvía, Fisherman Wharf y el autobús nocturno
El primer día nos lo tomamos con calma, así que salimos de nuestro hotel, que se encuentra situado justo al lado de Union Square, y nos vamos cuesta abajo a coger el tranvía más famoso del mundo, el que conecta la esquina de Powell y Market Street con Fisherman Wharf.
Nosotros cogemos la línea Powell-Hyde street y nos bajamos en Lombard Street, para descubrir la increíble pendiente de esta calle, una de las más empinadas de la ciudad. Después de verla y bajar el tramo de pendiente más famoso giramos a la izquierda y bajamos la calle hacia abajo (al fondo se ve Alcatraz), llegando irremediablemente a Fisherman Wharf por Leavenworth St.
Antes de ver la zona, vamos a la tienda de Sightseeing Pass, que se encuentra situada al lado de Leavenworth St, en Columbus Ave., justo en un pequeño parque triangular que encontramos antes de llegar a Fisherman Wharf, y allí en un momento canjeamos nuestros dos primeros billetes de la tarjeta turística: el autobús nocturno para la noche de hoy y el bus turístico para el día siguiente, y mientras esperamos a que se haga la hora para el autobús nocturno nos damos una vuelta por este precioso puerto de pescadores.
Media hora antes de la salida, prevista en este día para las 7:30 de la tarde, ya estamos haciendo la cola para el bus nocturno, para poder tener un buen sitio durante el trayecto, y eso sí, no se os olvide coger ropa de abrigo e incluso una buena chaqueta o anorak, aunque sea verano, pues en San Francisco de noche se pasa mucho frio y os vendrá muy bien para poder aguantar en la parte superior del bus. Para que os hagáis una idea, cuando llegamos al hotel después de la excursión hacía 12º C, y eso que era mitad de Agosto.
La excursión del autobús nocturno termina en Fisherman Wharf, justo en el punto de salida, y si nos quedamos dentro del bus nos acercarán hasta Union Square, que es donde estaba situado nuestro hotel, así que nos vino perfecto para volver. Si el hotel no se encuentra en Fisherman Wharf no os recomiendo bajarse ahí al finalizar la excursión, más que nada porque la gran mayoría de restaurantes estarán cerrados y hay ya poco ambiente a esas horas.
Segundo día: Alcatraz, acuario de la bahía, Pier 39 y Golden Gate.
El segundo día salimos del hotel, en Union Square, y nos dirigimos a la parada 18 del autobús turístico, que se encuentra en el hotel The Westin St. Francis, en la calle Post.
De allí el autobús turístico se dirige, a través de Chinatown, directo hacia el Pier 39, que es donde comenzamos el día de caminata.
Lo primero que hacemos es visitar un poco Pier 39, y saludar a la familia de leones marinos que nos encontramos allí, para luego ir andando hasta el Pier 33 y allí coger el barco para ir a ver Alcatraz, entradas que ya habíamos reservado con mucha antelación.
Tras terminar en Alcatraz, volvemos en el barco al Pier 39, comemos justo a la entrada la típica sopa de almejas (Clam Chowder, que la sirven en un pan un poco agrio que sólo encontrarás aquí) y entramos a visitar el acuario de San Francisco, The Aquarium of the Bay, pequeño, pero bastante entretenido, ideal si vas con niños.
A nuestra salida cogemos el autobús justo al lado para ir a nuestro siguiente destino: El Golden Gate.
Una vez en el Golden Gate, nos bajamos y vamos andando a hacernos las típicas fotos con el puente de fondo, y en lugar de cruzar a Sausalito decidimos volver al autobús, bajarnos en la siguiente parada y darnos un pequeño paseo por Golden Gate Park, que es una preciosidad.
A continuación, volvemos al autobús y terminamos el día de caminatas bajándonos en la parada de Alamo Square y subiendo la cuesta para disfrutar de una espectacular vista de San Francisco y sus Golden Ladies, terminando la jornada volviendo al mismo punto a coger el bus y volviendo a Union Square.
¿Merece la pena la tarjeta turística? Conclusiones
Por último, vamos a responder a la pregunta típica: ¿mereció la pena la tarjeta turística de San Francisco? La respuesta es sí, si hubiéramos pagado lo que usamos nos hubiera costado, año 2018, lo siguiente:
- Autobús nocturno por San Francisco: $32
- 1 día de Autobús turístico: $52
- Aquarium of the Bay: $24
Que hacen un total de $108. Como sólo teníamos disponibles un par de días para estar en San Francisco, escogimos la opción de 3 entradas, que en el año 2018 tiene un precio de $69, por lo que nos hemos ahorrado casi un 40% en las entradas. Con el uso del autobús turístico y el autobús nocturno ya rentabilizas hasta una Flex Pass de 5 entradas, que vale $84, así que si vais a estar un día más tal vez te interese comprar la opción de cuatro o cinco entradas, y así podrás alquilar una bici en San Francisco para ir por el borde costero y cruzar el Golden Gate hasta Sausalito y/o hacer alguno de los tours y atracciones que están disponibles, actualmente hay 18 posibilidades. Para más información visita la web oficial de San Francisco Sightseeing Pass.